El plan de rehabilitación consiste en una serie de pasos que se toman antes de recuperar las zonas afectadas o contaminadas por algún pasivo ambiental. Esto se da luego de que el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) identifica los sitios potencialmente contaminados y selecciona las zonas a remediar. La finalidad es dejar el agua y tierra libres de contaminantes.
Antes de iniciar el plan de rehabilitación se siguen estos pasos:
- La empresa contratada ingresará en el sitio contaminado, previo diálogo y permiso de las comunidades nativas, para tomar muestras de agua, de sedimentos y de la flora y fauna, a fin de identificar cuáles son los agentes contaminantes.
- Las muestras son llevadas a un laboratorio certificado para su análisis.
- Tomando en cuenta las condiciones del área visitada y los resultados del laboratorio, los especialistas definen qué técnicas de remediación son las más adecuadas.
- Se realiza un ensayo piloto en laboratorio.
- Tener resultados existosos: el ensayo piloto se traslada al campo, aquí se confirma la efectividad de las técnicas de remediación selecionadas. Cada caso de contaminación exige técnicas de remediación diferentes. Elaborar este plan dura 14 meses y es indispensable para volver a tener un medio ambiente saludable.
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